CONSEJERÍA DE SERVICIOS SOCIALES

Servicios Sociales inicia el proyecto de Dectección de Soledad no Deseada

- El objetivo es romper el aislamiento e impulsar un envejecimiento activo

La Consejería de Servicios Sociales ha iniciado el Proyecto de Detección de Soledad no Deseada. Un fenómeno que cada vez es más creciente en nuestra sociedad. Así, sólo en Ceuta, según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), hay 15.100 personas mayores de 59 años, de las que se estima que aproximadamente el 10% podrían estar en situación de soledad no deseada.

Por ello, el objetivo principal de este proyecto es romper con el aislamiento y favorecer el envejecimiento activo, mejorando la calidad de vida y bienestar emocional de las personas que pertenecen a este colectivo. Además, también busca sensibilizar a la población y dar visibilidad sobre este asunto.

De esta forma, se trabajará en favorecer y desarrollar el uso de redes sociales de apoyo que faciliten la integración de las personas mayores. Además, establecer un control y seguimiento de los casos identificados para evaluar la efectividad del plan y la coordinación de recursos e iniciativas públicas y privadas.

Siendo la prevención clave, la Consejería de Servicios Sociales ha previsto un plan de actuación a partir de la identificación de los principales factores de riesgo, como pueden ser la pérdida de la pareja, el deterioro de la salud o las barreras arquitectónicas.

De esta forma, dicho plan consiste en establecer los mecanismos para esa detección y el desarrollo de un protocolo de actuación para dar soluciones efectivas a las personas mayores que residen en Ceuta. Una iniciativa que se divide en distintas etapas, de las que ya se ha iniciado la primera, que es la elaboración de un mapa con todos los agentes comunitarios que son frecuentados habitualmente por los mayores.

Por otro lado, también se está trabajando en la Mesa Radar cuyo objetivo será el de evaluar los casos. Asimismo, y para estructurar todo este procedimiento, se está desarrollando un protocolo de comunicación de casos. A partir de ahí, se asignará, en función de las necesidades, un Plan de Intervención Personalizada para cada persona mayor que se encuentre en situación de soledad no deseada.