La naturaleza como "antídoto" a las redes sociales
El complejo Miguel de Luque acoge esta semana el Campamento Juvenil donde sus participantes, con edades de 8 a 14 años, se involucran en diversos talleres a lo largo de la mañana e iniciativas temáticas por la noche.
Este sábado concluyen varios días de convivencia y aprendizaje gracias a la oportunidad que tienen los 50 integrantes del Campamento Juvenil. La programación contempla talleres como el de periódicos o primeros auxilios que se desarrollan en la zona de la piscina, otro de manualidades o el de juegos de confianza. En este amplio catálogo no falta acrosport, el circo con sus malabares o cariocas, en un ambiente animado y pensado para que los pequeños se hagan personas autosuficientes.
Un campamento convertido en remedio contra la desconexión del mundo real que conllevan los teléfonos móviles. Por eso, desde la empresa Educador reivindican el papel de que los niños vuelvan a ser precisamente eso, niños. Y no se queden abducidos por las pantallas.