El helipuerto de Ceuta ha sido escenario este jueves por la mañana de un simulacro de emergencia aeronáutica para evaluar los procedimientos de actuación recogidos en su Plan de Autoprotección, analizar la eficacia de los mismos y comprobar el grado de conocimiento y coordinación existente entre los diferentes colectivos (externos e internos) que intervendrían en la asistencia a un accidente aéreo.
El Plan de Autoprotección, del que disponen todos los aeropuertos y helipuertos de la red de Aena, responde al objetivo básico de minimizar las consecuencias que tendría una emergencia aeronáutica, garantizando la protección de las vidas humanas y los bienes, así como la recuperación de la operatividad en el menor tiempo posible.
Durante el simulacro, se han analizado los tiempos de reacción y respuesta de todos los medios participantes, además de la integración entre ellos, a fin de optimizar su coordinación.

Además del personal de Aena y de los colectivos que desarrollan su labor en la infraestructura ceutí, como la compañía Hélity, encargada tanto del tráfico comercial como del sanitario (en UTE con Eliance), han participado los medios externos involucrados en el Plan de Autoprotección del Helipuerto de Ceuta: Área de Protección Civil de la Delegación, Área de Coordinación y Emergencias y Protección Civil (ARCE) de la Ciudad, Bomberos de Ceuta (SEIS), Policía Local, servicios sanitarios del INGESA, Autoridad Portuaria, Guardia Civil, el Colegio Oficial de Psicología de Ceuta (COPCE), a través del grupo especializado en atención de emergencias, y estudiantes del IES Almina como figurantes, y Cruz Roja. La Agencia Estatal de Seguridad Aérea (AESA) también ha intervenido como observadora.
El ejercicio ha simulado el accidente durante el despegue de un Leonardo AW139, con 12 personas a bordo (el comandante, el copiloto y 10 pasajeros). Durante la maniobra de despegue, un ave de gran tamaño colisiona con la aeronave. Debido al impacto, el piloto pierde el control y, en el intento por retomar el control, el aparato se precipita sobre la zona adyacente al edificio de servicios de la infraestructura y se produce un derrame de combustible. El tren de aterrizaje principal queda destruido, así como una de las puertas de acceso a la cabina de pasajeros, que queda bloqueada. Además de los daños estructurales, todos los ocupantes resultan afectados de diferente consideración, aunque no se registran víctimas mortales.

En el momento en que se produce el accidente, se declara la emergencia general y se activa a todos los medios internos y externos que intervienen en este tipo de situaciones. Durante el ejercicio, también se ha abierto la nueva sala de atención a familiares, con la participación de la persona de contacto para la atención a familiares y víctimas, dentro del protocolo de asistencia a víctimas de accidentes de aviación civil y familiares.
El Plan de Autoprotección del Helipuerto de Ceuta se mantiene actualizado mediante el desarrollo de simulacros generales como el de hoy, con carácter bianual, que permiten hacer un seguimiento continuado de la capacidad de respuesta de los servicios de emergencia en el helipuerto.