SANIDAD

El Sindicato Médico agradece a Robles la oferta de psiquiatras militares y condena que el Ingesa los rechazase

Robles, en una imagen de archivo.
- "El Ministerio de Defensa no solo había activado el protocolo necesario, sino que ya contaba con personal militar voluntario y disponible para desplazarse a Ceuta de forma inmediata", asegura

El Sindicato Médico de Ceuta (SMC) ha hecho pública este martes la carta que ha remitido a la ministra de Defensa, Margarita Robles, agradeciéndole su disposición a activar personal militar especializado en psiquiatría en Ceuta y ha "condenado" que el Ingesa lo haya rechazado "alegando que la plantilla está cubierta a pesar de que no hay ningún psiquiatra personal en activo en la ciudad desde el 18 de julio".

"El Ministerio de Defensa no solo había activado el protocolo necesario, sino que ya contaba con personal militar voluntario y disponible para desplazarse a Ceuta de forma inmediata: profesionales preparados, con nombre y apellidos, dispuestos a ofrecer su ayuda, que finalmente no pudieron intervenir porque desde la administración sanitaria civil se negó la necesidad de apoyo", ha lamentado el SMC en su misiva.

En ella denuncia que "es profundamente desalentador saber que incluso una teniente coronel psiquiatra del Gómez Ulla se había ofrecido voluntaria para acudir, mostrando una generosidad y vocación ejemplares, y que, pese a todo, esa ayuda se rechazó desde dentro".

A su juicio es "alarmante" que "se afirme que la psiquiatría infantil 'no ha estado desatendida', cuando llevamos meses sin psiquiatra infantil y los menores han sido derivados de forma improvisada a clínicas privadas: primero a Estepona, luego a Algeciras, y mañana —quién sabe— a cualquier otro punto del mapa" porque "derivar a niños con autismo o TDAH a través de barcos o helicópteros, familias con varios hijos en esa situación, sin acompañamiento ni continuidad, no es una solución sanitaria, es una forma de abandono encubierto".

"Tampoco es solución", ha apostillado, "anunciar la contratación de psicólogos como si fueran equivalentes a psiquiatras: no pueden diagnosticar ni prescribir y sobre todo estamos hablando de sanidad pública, no de una red de derivaciones privadas sin estructura estable ni arraigo en el sistema".