Durante la mañana y bajo la lluvia, el hermano mayor de la Hermandad de la Amargura, Jorge Ruiz, se encargaba de recoger uno de los últimos puestos del mercadillo y hacía un balance de esta temporada.
Por parte de la Consejería de Cultura, su asesor, Eduardo Ayala, hace una valoración positiva de estos días. La decisión de anticipar la clausura del Mercadillo Navideño ha sido consensuada entre los responsables de las casetas adjudicadas y el Área de Festejos.
Igualmente, la lluvia ha alterado la organización de otras actividades de la programación navideña. Este fue el caso de la Cabalgata de Santa Claus que comenzó el sábado antes de lo previsto mientras que el Belén Viviente en la Plaza de África se anticipó al sábado para evitar cualquier efecto a causa de las precipitaciones.
